Vaya, ya
estamos en febrero. San Valentín, nada más y nada menos. Una fecha que
despierta pasiones; pasiones de todas las clases, gustos y colores. Mirad
alrededor y observad.
Hay
personas que viven esta fecha como si fuera el día más importante de su vida;
compran decoración, fresas, champán, ropa interior sexy… con un poco de suerte
tendrán pareja para compartir un gran momento y si no la tienen, esperaran a
que suene el timbre y aparezca la persona… (nunca se sabe, esas cosas pasan… a
la conocida de una amiga de una amiga…).
Hay
personas que reniegan, no quieren oír del tema. ¡Tonterías y más patrañas! 14
de febrero, viernes; víspera de fin de semana. Un día como otro cualquiera,
trabajo, casa, amigos, familia… (luego celebran el día de San Patricio como una
de las grandes fechas del año, en fin, cada uno celebra lo que quiere y puede).
Hay
personas que retrasan momentos especiales para vivirlos en fecha tan señalada,
así no tendrán que recordar una fecha más. ¡San Valentín! Hoy toca celebración,
regalo y momentazo. Sin complicaciones (simples, sencillos, prácticos…)
Hay
personas que lo celebran, pero no junto a quien quieren estar, lo celebraran
con su pareja deseando que llegue ese mensaje, ese wassap, ese telegram… para
dejar que la sonrisa real salga a la luz. (Triste, lo sé, pero esto, esto pasa
mucho más que lo del timbre…).
… …
… …
Ya os lo
decía, pasiones de todo tipo de clases, gustos y colores. Y a pesar de todo
ello, el calendario hoy dice que es 14 de febrero, San Valentín, día de los
enamorados… Una celebración, una excusa para dar un beso un poco más tierno, un
abrazo un poco más largo o una caricia un poco más… (seguro que se os ocurre
una palabra para terminar la frase). Y seguro que todos estamos, (de una manera
u otra), enamorados… enamorados de nuestra ciudad; de nuestra pareja; de
nuestro país (o del último que visitamos); de nuestro trabajo; de nuestros amigos;
de nuestra familia; de nuestros sueños; del vecino de séptimo; o de nuestro
perro… Y para celebrarlo que cada uno lo haga sin sentirse coartado, cohibido o
presionado… un libro es tan buen regalo como una sonrisa o un “buenos días”…
así que salid ahí y celebrarlo (que con la que tenemos encima cualquier motivo
de felicidad es estupendo).
¡Feliz
San Valentín! ¡Feliz día de los enamorados! ¡Feliz 14 de febrero! ¡Feliz viernes!